Escena AB: Camino

Cuando Camino llega al aula 4-14 allí solo está un tipo gordo tumbado sobre unas seis mesas con un perro al lado suyo durmiendo. El perro al oírte gruñe y su amo automáticamente se despierta mirando hacia la puerta, al verte sonríe dándole un beso en el hocico.

- Tranquilo Peque, solo es Camino Fernández, la gran estrella de televisión. – le guiñó un ojo al animal antes de apartarlo a un lado – Llegas casi una hora tarde. Pensaba que los actores teníais la costumbre de ser puntuales. Tus compañeros están ya trabajando.

La muchacha termina de subirse el mono con cara de mala leche. Elgilipollas que tiene delante ya le esta tocando los cojones desde el principio. Total ya llega tarde. Ya la ha jodido. Se concentra en el vaso de Pocoyo mientras murmura - Hmm. ¿Nunca has visto los oscars o que? Esa gente flipa por llegar tarde. -Tronco vaya perro mas feo, igualito que su dueño. Se mira distraidamente las uñas perfectamente esmaltadas mientras avanza hacia el y se sienta en la mesa del profesor. - Bueno, ¿Que tengo que hacer entonces?

- Pues tienes dos opciones... o puedes quedarte un rato a hacerme compañía - dijo guiñándole el ojo y poniendo una sonrisa pícara realmente asquerosa – o puedes coger el material de limpieza e irte al parque a buscar a una orca de piel oscura con un tipo con cara de malote para ayudarles mierda alrededor del estanque.

Tras regodearse unos segundos en la repulsiva expresion del tipo que tenia delante, vuelve al tema de sus uñas. Sonrie melosa y distraida. Es genial que te hayan enseñado a hacer esas cosas y encima le den pasta por ello. Levanta los ojos de nuevo y al encontrarse de nuevo con el, se da cuenta de que tendria que haberse tomado algo mas antes de salir de casa. -Bueno, me lo preguntas en serio? Tan mala es tu compañia o que? -Extiende la mano hacia el tratando de no pensar en el Axoren que lleva en el bolso. -Que, te gusta este color de uñas? Tu eres trabajador social o algo asi no? O que?

Él la miró a la chica y sonrió extremadamente satisfecho. Extendió la mano agarrando con sus dedos rechonchos la de Camino pero la miró directamente a los ojos sonriendo.

- Mi compañía es la mejor si sabes como mantenerme entretenido. Por eso soy un buen trabajador social, doy tanto cariño como recibo y así aprendéis un poco mejor que es la vida. – tiró de ella poniéndola de pie a un metro de él y extendió la mano a la cremallera del mono. – Hazme feliz y tu estancia aquí será maravillosa.